Desde empleados municipales hasta trabajadores sindicalizados, lo mismo que diputados y miembros de organizaciones civiles, desfilaron por las calles de la capital oaxaqueña para apapachar a Claudia Sheinbaum en su primer día de campaña a la candidatura presidencial.
Inició su recorrido con una fiesta tradicional, tipo calenda. Entre empujones, la aspirante caminó rodeada por los diablos danzantes del grupo "A ver si puedo", mujeres con vestidos tradicionales, bandas musicales y enormes globos de papel con su nombre.
Aunque desde días antes se sabía que Gerardo Fernández Noroña arrancaría su gira en la Fuente de las Ocho Regiones, punto simbólico en la entidad, el equipo de la ex Jefa de Gobierno también convocó a la caminata con la ex funcionaria en el mismo lugar.
Para evitar un enfrentamiento, horas antes decidieron cambiar la sede, sin embargo, decenas de personas llegaron a ese punto.
El alboroto atrajo a lugareños, quienes observaban la concentración desde las azoteas y ventanas de sus hogares, y de turistas, quiénes preguntaban qué sucedía.
Tras caminar 45 minutos, Sheinbaum llegó al zocalo oaxaqueño, donde ya la esperaban miles de personas. La desorganización y euforia de los simpatizantes, provocaron empujones y hasta golpes, por lo que la funcionaria no pudo ingresar al templete por el pasillo de vallas metálicas diseñado para ella.
"Muy buenas tardes Oaxaca, en el camino de esta calenda fui perdiendo mi voz de tanto grito, pero estamos presentes", argumentó con voz ronca.
Con dificultades habló 20 minutos, en los que recalcó que el dedazo no existe en Morena, pues su partido decidió realizar una encuesta para elegir a quien coordinará los trabajos de organización del partido.
No es necesario que a los asistentes se les dijera por qué cargo compite, pues la gente le gritaba "¡Es Claudia! ¡Presidenta!".
Dedicó su mensaje a las obras que realiza el Presidente Andrés Manuel López Obrador en Oaxaca.
"En ese corredor transístmico habrá 10 parques industriales. ¿Ya lo sabían? Levante la mano el que lo sabía", cuestionó a la multitud, pero pocas manos se observan arriba, por lo que ironizó: "No, pues sí están informados".
Sheinbaum argumentó que decidió apuntarse porque considera que los derechos que se abrieron con el tabasqueño en la Presidencia deben fortalecerse.
Sheinbaum cerró su discurso con su clásica frase sobre las aspiraciones de las mujeres."También es tiempo ya de las mujeres. Nos dijeron mucho tiempo que solo podíamos estar en algunos lugares, en la casa, con nuestros hijos, pero también tenemos derechos, a la igualdad, por eso decimos que los sueños de las niñas y los jóvenes pueden cumplirse.
"Y las mujeres también podemos ser Presidentas de la República", remató, en medio de gritos de "¡El puedo, decide, Claudia es la que sigue!".